".... El espíritú se limpia...
Sí, así: con doble acento.
Ya no quiero odiar ni jugar a que amo.
Ahora jugaré a que juego y amaré porque amo.
Luz de luna en mis oídos.
Suspiros del sol en mis entrañas.
Y tu rostro inserto
en mi sangre.
Paciencia, que muero por llegar.
Y besarte a cada paso...
.... acariciarte mientras duermes.
La luz está aquí y no al final del camino".
- Tus tiernos ojos.